Inventario De Bienes

Empresa especializada en inventario de bienes

Conocer el número de activos y su valor es una información que toda persona y empresa debería de tener.

Dónde realizar inventario de bienes

Para garantizar la seguridad y la objetividad en una cuestión tan relevante como conocer el patrimonio de una persona física o jurídica, contacta con nosotros. En Aesval, sociedad de tasación oficial avalada por el Banco de España, llevamos más de 10 años ofreciendo soluciones dentro del mercado de las valoraciones. Además de la experiencia, la neutralidad y la independencia son del todo fundamentales en nuestra cultura corporativa, pues lo que nos caracteriza es la inalterable profesionalidad a la hora de ofrecer tanto este servicio como todos los demás.

Tipología de inventario de bienes

En una clasificación muy general de los inventarios, podríamos decir un tipo sería el periódico y otro el de fuerza mayor. Es decir, un inventario habitual es aquel que se realiza para llevar un seguimiento y control de los bienes que existen en un ámbito muy concreto, bien sea personal o profesional. Sin embargo, hay otros que se han de hacer por algún tipo de causa puntual, los dos ejemplos más claros de este tipo de inventarios son, por un lado, la herencia en cuestiones personales o el inventario derivado de un concurso de acreedores en el ámbito profesional o de empresa.

Sea cual sea la naturaleza del inventario de bienes, los procedimientos para su realización deben ser rigurosos, pues es un trabajo minucioso y en que los pequeños detalles marcan las diferencias.

Situaciones en las que es necesario un inventario de bienes

Como ya hemos dicho, hay algunos escenarios en los que es evidente la necesidad de acudir a una sociedad especializada en inventarios para conocer, de una manera profesional y objetiva, la valoración de los bienes de una persona o una empresa. A continuación, se muestran algunas de estas situaciones:

  • Valoraciones de inmovilizado: este tipo de inventarios de bienes están incluidas en las cuentas oficiales que toda empresa debe realizar dentro del Plan General de Contabilidad. Por tanto, hablamos de que la identificación y registro de los bienes de las empresas se ha de hacer periódicamente y la correcta realización de esa catalogación es de vital importancia para que las cuentas cuadren a final de año.
  • Valoraciones patrimoniales empresariales: conocer el valor del conjunto del patrimonio de una empresa es una información clave. Un ejemplo claro es una operación de compra venta o de adquisición, en la que una parte desea comprar parte o la totalidad de la empresa a la otra. ¿Cómo saber cuánto posee esa sociedad en bienes? La respuesta es siempre: realizando un inventario y su posterior valoración económica.
  • Valoraciones patrimoniales personales: pasamos el ámbito empresarial al personal, pues ya conocemos que los inventarios de bienes pueden tener estas dos fuentes. La valoración patrimonial se basa en valorar todos y cada uno de los bienes que pertenecen a una persona.
  • Procesos concursales de acreedores: si hay una situación en la que resulta fundamental conocer la valoración de los bienes de una sociedad es en el momento en el que esta presenta un concurso de acreedores. En ese momento, ya no solo es relevante para la empresa en cuestión, sino también para todos aquellos acreedores afectados. El procedimiento concursal, siempre bajo la supervisión de un juez, se realiza para que todas las obligaciones pendientes de pago se cumplan, ya sea mediante un acuerdo o con la liquidación forzada de bienes y activos. Por tanto, como se puede comprobar, la identificación y valoración de los bienes de una empresa en concurso de acreedores no es que sea relevante, es que es obligatoria.
  • Peritaciones: un siniestro, en la mayoría de los casos, conlleva un peritaje para plasmar, de una manera oficial y objetiva, los daños o pérdidas causados. Bien sea un robo, un incendio, o cualquier otro tipo de problema, disponer de un inventario de bienes ayudará a la investigación y a todos los agentes involucrados, pues ofrecerá una visión clara de los bienes que había antes del siniestro.
  • Herencias: como ya hemos comentado, una de las situaciones en las que los inventarios de bienes son importantes es en la del fallecimiento de una persona. Las defunciones conllevan, parte de los casos, un testamento en el que refleja, con anterioridad a la muerte de persona, la voluntad del reparto de los bienes. Para realizar ese reparto, ya sea total o parcial, entre una o entre varias personas, se debe conocer hasta el último bien dentro del patrimonio del difunto.

¿Qué bienes pueden entrar dentro de un inventario?

A continuación, se enumeran ejemplos de tipologías bienes que perfectamente se pueden encontrar en cualquier inventario:

  • Equipos tecnológicos y de la información: ordenadores, impresoras, teléfonos, calculadores, fotocopiadoras, monitores, cámaras de seguridad…
  • Mobiliario de oficina: muebles, sillas, mesas lámparas, alfombras y cortinas, lámparas, rótulos e indicadores, teléfonos, calculadoras, máquinas de escribir, fotocopiadoras, etc.
  • Maquinaria: máquinas para realizar trabajos específicos, equipos de cocina, electrodomésticos, aparatos relacionados con la actividad de la empresa…
  • Herramientas generales y utensilios cotidianos
  • Cualquier tipo de medio de transporte: coches, camiones, motos, bicicletas
  • Otros: pinturas, cuadros, instrumentos musicales o científicos…
  • Aplicaciones tecnológicas o informáticas, softwares, herramientas digitales…